La mayoría de los españoles quieren ser propietarios de una vivienda, aunque la proporción de hogares que viven en una vivienda de alquiler ha pasado del 11% del año 2011 a más del 20% en el año 2017, en Europa la media ronda el 30%. Hay tres opciones para conseguir una vivienda, se puede comprar nueva, de segunda mano o construirla desde cero.
Vivienda de obra nueva
La obra nueva son viviendas modernas, con modernidad óptimos y con incorporación de nuevas tecnológicas. La principal ventaja de estas construcciones es que no necesita ninguna reforma. Además es eficiente energéticamente, eso ayudará a controlar los gastos en las facturas. Aún así, del mobiliario se encarga el propietario, es un gasto extra.
Las desventajas de la obra nueva son la ubicación, se sitúan en el extrarradio de las ciudades, pero eso permite que el tamaño de la vivienda sea superior a las del centro de la ciudad porque el metro cuadrado en las afueras es más barato. Por otro lado, hay plazos de espera largos, sobre todo si la vivienda está comprada sobre plano. Las viviendas sobre plano necesitan que se les adelanten los pagos antes de que esté terminada.
Vivienda de segunda mano
La ventaja de comprarse una vivienda de segunda mano es la ubicación, se encuentran en zonas céntricas o suelen estar en zonas donde la población ya ha crecido. Por eso, están cerca de cualquier servicio.
Una de las desventajas es que las viviendas son más pequeñas, del mismo modo que, según la edad de la vivienda adquirida, pueden surgir gastos extras que habrá que afrontar. Por ejemplo, puede ser un gasto desprevenido cambio de instalación eléctrica, renovaciones estéticas, aislamiento, tuberías…
Desde el punto de vista fiscal, tanto las compras de viviendas de primera mano como de las usadas tributan. Si las primeras transmisiones de inmuebles están sujetas a IVA (el 10%, excepto para las viviendas de protección oficial, por las que es un 4%), la compraventa de una casa de segunda mano está gravada por el Impuesto de transmisiones patrimoniales (ITP). “Dependiendo de las Comunidades Autónomas, el ITP variará entre el 5% y el 11%”, destaca Gonzalvez, el director de hipotecas del comparador bancario iAhorro.
Autopromoción: hipotecas para construirla tú mismo
Según Eurostat, en España, alrededor de un 34% de la población vive en una casa. En cambio, el 92% de los irlandeses viven en una, son los europeos que prefieren establecer su hogar en una casa, ya sea adosado o independiente.
Gonzalvez subraya que “Para formalizar este tipo de operaciones es necesario que la finca que corresponde al solar donde se va a ejecutar la obra sea propiedad de los titulares, ya que normalmente el banco no financia el suelo”.
Golzalvez explica que “Lo más peculiar de este tipo de vivienda y la concesión de hipotecas sobre ella es que no existe una única disposición inicial sino que existirá un porcentaje de disposición inicial en base al principal y una serie de disposiciones intermedias”.
Las ventajas de la autopromoción es que el propietario se ahorra los costes del promotor y de la inmobiliaria, también puedes personalizarla y apostar por una vivienda más sostenible y de mayor durabilidad.
Fuente: https://elpais.com/economia/2018/03/06/actualidad/1520333416_268236.html
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