Hot-desking, la nueva estrategia de flexibilidad de espacios de trabajo

En los últimos años se ha comprobado que distribuir el espacio de las oficinas de forma eficaz incrementa la productividad de los trabajadores y ayuda a obtener unos resultados más favorables, pero ¿en qué consiste exactamente el “hot-desking”?

¿Qué es el hot-desking y en qué tipo empresas es más útil?

“Hot-desking” es una adaptación del concepto hot-ranking, utilizado por los marines que compartían las literas por turnos, según sus horarios.

Utilizando este método, muchas compañías están tomando la decisión de gestionar sus instalaciones de una forma más eficiente, ya que la mayoría de las oficinas no se utilizan el 100% de sus espacios.

Esta tendencia consiste en dotar de una flexibilidad de los espacios de trabajo, sin asignar ningún puesto fijo, por lo que se puede adaptar según las necesidades de cada trabajador.

En realidad, se trata de espacios compartidos en los que el trabajador acude con sus pertenencias y documentos a una mesa que haya libre, trabaja y se va. Pero, como todo, tiene sus cosas positivas y negativas.

Es muy útil en los trabajos que requieren creatividad, ya que los espacios comunes permiten interactuar y liberar la mente, así como favorecer el intercambio de ideas. Además en momentos que requieren concentración, privacidad o reuniones existen habitaciones privadas que el trabajador puede utilizar.

Por otra parte, estos espacios abiertos son muy beneficiosos para los emprendedores, nuevas o pequeñas empresas ya que es una opción más económica y pueden ahorrar gastos innecesarios, a la vez que disponen de un ambiente ágil.

Ventajas e inconvenientes del Hot-desking

Ventajas: Sin duda alguna, se ahorra espacio, ya que permite que trabajadores de áreas y profesiones distintas trabajen en una misma zona, pudiendo suponer una reducción hasta del 50% de espacio necesario en oficinas convencionales.

En relación a eso, disminuyen los costes de la empresa ya que no se paga el local completo, sino únicamente el lugar de trabajo que se utiliza.

Además, se ha visto que con este método existe una mayor comunicación entre los trabajadores de distintos sectores, surgiendo colaboraciones simultáneas en proyectos o simplemente fomentando una buena relación y ambiente de trabajo.

Inconvenientes: cómo comentábamos anteriormente, consiste en llegar, trabajar en un lugar que encuentres libre e irte, por lo que el trabajador nunca sabe cuál será su zona de trabajo la próxima vez, ni con quién la compartirá. Esto puede generar un clima laboral más frío y la inestabilidad de no tener un lugar fijo puede generarle desconfianza o incomodidad ya que no tendrá una mesa en la que tener sus cosas, sus recordatorios, una planta o simplemente una foto familiar. Únicamente podrá trabajar en una mesa vacía, su ordenador y poco más.

Por otra parte, se ha visto que en relación a lo anterior, en algunos casos los trabajadores pierden motivación y creatividad, ya que no existe ningún vínculo emocional con su lugar de trabajo. Aunque es algo que suele darse en pocas ocasiones, ya que se ha comprobado que las personas que utilizan el “hot-desking” no suelen tener tiempo de valorar eso y priorizan otros aspectos.