En la actualidad, la compraventa de propiedades es algo en auge e incluso hay personas y agencias que se dedican a ello. Pero no es algo sencillo, ¿cuáles son las claves para salir ganando siempre?
¿Quién puede invertir en una vivienda?
Invertir en una vivienda no es algo que se deba tomar a la ligera, ya que es un negocio que requiere de una buena inversión que podrá ser, o no, recuperable en un futuro no muy lejano.
Como casi todo en esta vida, invertir en una vivienda para después venderla y tener un beneficio, es un negocio. Y este negocio puede darse a tres niveles: inmobiliarias o empresas de construcción, particular que no se involucre en el proyecto o particular o pequeña empresa que se haga cargo del acondicionamiento y reforma de la vivienda.
Es por ello por lo que a mayor o menor escala, todos tienen un papel y éste determina el grado de beneficio que obtendrán, a continuación te damos las tres claves imprescindibles que se suelen seguir para poder salir ganando siempre que se invierte en una vivienda.
Realizar una inversión rentable
Lo más común cuando se realiza la inversión en una propiedad que no es para uno mismo, es hacerlo en una zona rentable.
Para ello se valora el valor de la propia vivienda y el margen de beneficio que presenta, así como el coste del acondicionamiento que requerirá. Sopesando estos dos factores, es posible llegar a una decisión acertada, realizar una inversión relativamente pequeña y obtener el máximo beneficio.
La elección del tipo de comprador
Cuando se decide por invertir en una vivienda, es muy importante tener claros los objetivos, y por lo tanto, la fuente de las ganancias y los beneficios que obtendremos con este negocio.
Se debe estipular a qué perfil de comprador se quiere dirigir para vender o alquilar posteriormente la vivienda en la que se vaya a realizar la inversión.
Esto se puede determinar teniendo en cuenta muchos factores, pero los más utilizados son la clase social, el poder adquisitivo, sus necesidades y gustos, el motivo o motivos por los que requiere comprar la vivienda o alquilarla, o servicios extra o condiciones que le puedan interesar, entre otros.
De este modo es posible enfocar el negocio del inversor de la vivienda. Ya que no es lo mismo comprar una vivienda asequible y sencilla y sacarle un pequeño beneficio (se puede hacer de manera sucesiva), que invertir una cantidad considerable de dinero en comprar la vivienda y otra buena parte en realizar el acondicionamiento y las reformas que sean necesarias y más, con la intención de vendérsela a un perfil de comprador para el que el dinero no es un problema (que es posible realizar menos veces pero obtener un gran beneficio).
La ubicación: elección de un buen lugar
Sin duda, la elección del lugar en el que se decide invertir juega un papel clave en el negocio. Y éste debe ser atractivo e interesante para vivir o pasar una temporada.
Se debe tener en cuenta que este factor va muy ligado a la elección del comprador, ya que determinará las necesidades y prioridades que este considere óptimas. Hay algunos que priorizan el clima o que haya costa, que disponga lugares de ocio cercanos o que sea una zona más tranquila…etc.
Y tú, ¿Ya sabes cómo quieres enfocar tu inversión?
Fuente: http://einmobiliario.es/consejos-inmobiliarios/3-consejos-invertir-una-vivienda/
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